domingo, 11 de enero de 2009

Estúpido velo.


A veces hasta me sorprendo de la gente que me dice que se pasa por aquí.
Que igual hace tiempo que no veo, y que me preguntan por algo que yo había contado en el blog...
No niego que eso me encanta.
Es como un jodido diario, pero sin tener presente muchas veces que estás cometiendo la estupidez de desnudarte ante todo el mundo.
Con tus pensamientos y/o chorradas.
Pero nunca he tenido nada que esconder, y con el rollo este del blog, si al menos algo que guardar.
Cuando los recuerdos o vivencias funcionan como una linterna mágica...
Sesión de diapositivas de una existencia, a la que no hay que asistir a una sala oscura y cerrada. Si no con pase de preferencia en el estreno de tu ansiado optimismo.
Porque no siempre todo va de cine.
Ni hay ganas de contar películas.
Pero si que interviene el alma bloguera para interpretar muchas veces un papel que no se corresponde con la realidad inmediata.
Cuando salir a escena no es hacerlo en el acto. Toda una redundancia...
Es que alguien me ha dicho hoy que me estaba sincerando demasiado por aquí.
Corramos el telón.
Para nada.
Hay tantas cosas que me callo y que no figuran en el reparto...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deje AQUI su comentario