Vacaciones en Cerdeña

Cerdeña.Tierra misteriosa.Poco conocida.Bello lugar al que no suele recurrir el turismo convencional.

Parajes que en otro tiempo pertenecieron a la Corona de Aragón.De una riqueza cultural extensa y de oferta de variedad amplia,como todos los lugares que han visto pasar a diversidad de pueblos a lo largo de la historia,adquiriendo distintas costumbres y en definitiva creando un arraigo propio.Y peculiar.

Cerdeña fué habitada por fenicios,cartagineses y romanos,más tarde por vándalos, bizantinos,árabes y aragoneses.Y antes de estos últimos,andaban los pisanos y los genoveses dándose de ostias por alli disputándose sus tierras.Sin olvidar la cultura autóctona de la isla,la civilización nuráguica,que antes de que llegaran los fenicios ya construían sus movidas;templos,torres defensivas,tumbas y demás,en el acojonante siglo del XVI a.d.C.Vamos,que por aquellas fechas,fijo que Cristo se pone a predicar y no le hacen caso ni las piedras.Y muchas obras de esa gente aún siguen en pie.Eso me fascina.Se nota claramente que aún no habían inventado la vivienda de protección oficial.

Pues con este prefacio,quizás innecesario,me dispongo a resumir mi semana en Cerdeña.

Parto de la opinión que estando de vacaciones,uno disfrutaria en cualquier sitio,vamos que me valdría una semana en los Monegros y en un festival bacaladero para sacarle jugo a la situación casi mística de lo que significa;por fin,una semanita de vacaciones!!

De cualquier forma,si el lugar acompaña,como en este caso,y la compañia es cojonuda,como también sucedió al marcharme a esta aventura con María,pues todo queda dicho.

Iniciamos viaje hacia Gerona,dejando el coche en el aeropuerto en zona de pago,porque no había opción de aparcar libremente por allí y porque estos catalanes algun dia empezarán a vallar el campo y exigir tributo de paso.

Era uno de los flashes que venian a la cabeza de vez en cuando estando en tierras sardas (( ya verás cuando saquemos el coche,igual uno se lo encuentra requetelimpio y hasta tuneado y te hacen pagar mas extras aparte la semana de parking,porque esta gente es así...))

Nunca había montado en avión,digamos que en ese punto perdí mi virginidad,y nunca mas apropiado si el verbo que has de usar para dicha referencia es el verbo montar...¿desvirgación avial?suena raro raro.A ave.A algo que le pudieran hacer a los pollos,y ya veo que si ahora utilizo también el femenino en estas criaturas,la cosa ya puede salirse de madre.Lo dejo,pero que era mi primera vez,joder.

Nuestro primer destino,Alguero.Ciudad de clara influencia catalana;no has de ver a gente a lo gorrilla posicionando los aviones en el aeropuerto y demandando unas monedas por el servicio para darte cuenta de ello.

Hasta el escudo de la ciudad posee las mismas franjas que la bandera catalana (que no es tal en su orígen,sino al igual que la bandera de Valencia y Mallorca,que también portan franjas rojas y amarillas tienen su herencia por pertenecer todas estas regiones a la corona de Aragón )o quizás descienda paralelamente con la de la Corona de Aragón,de su creación en el medievo gozando del beneplácito de la Santa Sede,que ya tenían estos colores,y de ahi fueron adoptados,pero esa es otra historia...

El caso es que en Alguero tienen un particular medio de locomoción turistico llamado "trenino catalano".Y si te ven que eres de fuera,no dudan en despedirte con "Adeus"

Pues en esta ciudad paseábamos dejandonos llevar por el embrujo de sus calles,el ambiente de su paseo marítimo y su encanto particular al caminar a lo largo de sus murallas,desde alli arriba el mar,en su inmensidad.Las terrazas de los cafés invitaban a una relajada paradita.Y la visita a las tiendas de regalos,que bullian con multitud de gente,se antojaba casi necesaria.Por algo nos pareció de todo cuanto vimos en la isla,la ciudad mas turística.

En su playa nos embarcamos en un simulacro de Ferry,a la llamada "Gruta de Neptuno" Según rezaba en algún panfleto,visita obligada para grandes personalidades que en aquella ciudad se habian dado cita.Que cojones,que nosotros no éramos menos.

Vimos la cueva,bonita,muy grande.Quizás mas grande que bonita,porque esta gente seguro que no ha visto las de mi pueblo...Toda la visita guiada en perfecto italiano,inglés y alemán,esto se hizo inquebrantable para toda situación de explicación turistica en estas vacaciones.¿Habrá que echarle la culpa a Zapatero?

Lo del barco duraba más de 2 horas,molaa.De regreso vimos delfines nadando muy cerca,y al bajar del barco a la playa,un truño de raza humana que por tamaño mas se asemejaba a una nueva clase de boya que anunciara algún riesgo marítimo del 15,ahí,flotando en toda su plenitud.Esto nos hizo desistir de un posible bañico antes de cenar...

En alguero pasamos 2 días.Alli teníamos ya un coche reservado para toda la semana trotar por la isla.

Lo más gracioso de alli fue el hospedaje,que cogímos por internet.Típico alojamiento de estos que denominan ahora Bed & Breakfast.

Teníamos el número y el nombre de la calle,y esto no fué suficiente para dar con él despues de pasar 3 o 4 veces por la misma puerta.Ningún letrero.Nada.En esta región de la tierra estoy por asegurar que muchas de las indicaciones deben realizarlas con tinta invisible.

Preguntamos en un hotel por la dirección que teníamos escrita.Curiosa la gente de estos lares,en vez de una pronta contestación,a sabiendas que estás buscando a su competencia,coge el recepcionista cuando estamos mirando un mapa de la pared mientras hablábamos,lo descuelga en lugar de hacernos que nos acercásemos y nos dá toda clase de información.Que grande.

El caso es que,previsores de nosotros,teníamos papeles con todo lo que reservamos por internet.Y habia un numero,el señor en cuestión,Marcelo Meloni.

Apellido gracioso y que parece muy abundante en la isla.Pero viendo lo visto,no hubiera desentonado de segundo llamarse Corleone,porque el trato con el no fué para menos.Nos contesta al movil en medio italoespañol y sentencia:en 4 minutos os mando a Salvatore para allá.

Ya dimos con la puerta.En la espera nos cercioramos de que la puerta al chalet en cuestión tenia cadena,pero en su interior no había candado.Llegó Salvatore,en moto.Bajó como una exhalación.Le metió un empujón a la puerta que el lobo de los 3 cerditos,lo hubiera hecho con más cuidado,y para adentro.Todo ello sin pronunciar palabra por su parte.Nos mostró la habitación y el baño y se esfumó.Asi,sin pedir DNI ni pollas.

Esta claro que uno baraja como hipótesis en esta cuestión la sensación de que estos tíos son de la mafia,y no se preocupan de la identidad de los inquilinos.Que si se la haces,te encuentran.Porque raro de cojones es,ningún dato por tu parte,solo el pago por adelantado,y te encuentras en una villa que tiene teles,piano y demas cacharros de valor .Que aguardas con el furgón a que se vaya y renuevas hechando leches tu mobiliario.Están locos estos romanos.

Salvatore era un tipo alto,calvo y de perilla.Que no me costó mucho imaginar como martillo de la mafia en operaciones puntuales.A la llamada de Don Meloni,no dudaría en revisar su pistola mientras le explicaba por teléfono los pormenores de la operación.

Estábamos muy bien en esa casa,y nos sentímos asi como que protegidos...

Visitamos cerca de Alguero un túmulo de los individuos esos de los nuragues,cuyo yacimiento no recuerdo el nombre,pero una pasada.Había mas de 30 tumbas excavadas en la puta roca.Unos nichos que formaban galerías que debieron suponer una auténtica currada.Pena que mi flamante cámara nueva se merendaba las pilas,la solución fueron las duracell plus.

De allí fuímos a Sassari,que es la capital de esta provincia.Vimos poco de la ciudad,porque había mucho tráfico y bastante caos.Lo justo para comprar comida en un supermercado,un paseillo por el centro y el tiempo de perdernos una vez y andar con el puto plano preguntando pa ubicar donde ostias teníamos el coche.

Y como la aventura es eso,buscar la mejor ventura.Cogímos nuestro alquilado Lancia Ypsilon y nos hechamos a la carretera sin un rumbo fijo.

La intuición nos llevó a Porto Torres,y bendita intuición.Ese pueblo no salía en ninguna de las dos guías de Cerdeña que llevábamos encima.

Aquella noche dormimos en el coche.Amaneci que si quería eruptar,espontáneamente hacía el gesto con mi brazo de meter segunda marcha.Menudos aprietos en el Ypsilon oiga.En nuestras ansias de alejarnos un poco del mundanal ruido,dormimos aparcados a las puertas de un salón del reino de los testigos de Jehová.Es que es sabido que estos madrugar,no madrugan mucho.No sea que con ello hagan mala sangre...

De día fué cuando nos dimos cuenta de lo que nos rodeaba.Porto Torres era una ciudad bastante chula.Con su playica,sus ruinas de termas romanas,en las que no se podía entrar,y que nos echaron una vez dentro,nosotros haciendonos los despistados,a lo "mi no comprender",y un museo bastante completo.Aun no entiendo como no la mencionaban en las guias.

A María le abandonó la relajación que hasta entonces le acompañaba,pues ese día conducí yo.

El tráfico es lo que más llama la atención por estos lares,y al parecer es igual en toda Italia.Esta todo diseñado para la complacencia del conductor.Allí un peatón goza de menos comodidades que una rata en Guantánamo.

Practicamente no existen las aceras,por ejemplo.Era curioso de ver,y nada raro,el ir al centro de un pueblo pequeño,y ahi mismo,frente al ayuntamiento,en una plaza pequeñisima,se habían cascado una rotonda,en la que pasaban coches constantemente,ni respetando cedas el paso,ni aplicando orden de preferencia alguna.

Lo que en tu pueblo sería un callejón donde los abuelos toman la fresca,aqui te pintan unas lineas blancas y te hacen dos carriles.

Aquello era la selva.Lo normal era ir tú por la carretera,salir uno de repente a tu carril,y tú frenar.Si te quedabas en un stop mas de dos minutos porque pasan coches a la vía que te incorporas,te pitan.

Si sales haciendo frenar al otro,metiéndote la gran cruzada,no pita ni Dios.Es inevitable que ahora cuando veo cosas de este tipo en nuestro país,lo defino como cerdeñadas.

Salímos de Porto Torres sin destino establecido.por carreteras extrañas.Llegamos a un poblacho llamado Oschiri.En el que había pizzerias con carteles pintados a mano,y un cartelito en el mismo centro de la población muy cachondo,pués dimos tres vueltas siguiendo la puta flechita hasta darnos cuenta que el centro del pueblo era donde estábamos y que te lo marcaba en el mismo centro otra vez.

No se,quizás querían dar una extraña sensación de que el pueblo era mas grande.

Vimos en el mapa una laguna cercana y decidimos visitarla,ya para rematarla.Pues resulta que la bordeamos,esperando ver alguna señal,un descansillo para parar a comer,algo asi,que hubiese sido lo mas normal.

Y siguiendo la carretera nos metimos por un camino que era un paso para cazadores o similar,que rodeaba todo el sistema montañoso de esa comarca.Cuando llegamos a lo mas alto,descansamos del rally y comimos.

Y que atrás quedó la laguna.Luego seguir por esta carretera extraña,con mogollón de curvas,pero de paisajes preciosos.La Cerdeña profunda.Cuando ya pensábamos que igual se averiaba el coche,y que esa noche seríamos cena para los lobos,tuvimos contacto con la civilización.

Pasámos por algún que otro pueblo hasta llegar a Olbia,segunda ciudad importante de la provincia.No sin antes intentar ir a ver una tumba de gigantes,que alli llaman a unos monumentos megalíticos que són la ostia.Ir a ello,cogiendo un camino asfaltado,hasta que se terminó,desistir de tal empresa,intentar dar la vuelta,para encallar en un hoyo que más correctamente le hubiera llamado accidente geográfico.Y revolucionar el motor del coche hasta salir,que no sé que hubiese ocurrido de no ser así.Porque yo seguia pensando en la dieta de los lobos.

En Olbia encontramos para dormir un apartamento bastante acogedor.Era una población algo caótica,como siempre por el tráfico,y era extraña,pues tenia mar,mucho muelle,al igual que embarcaciones,y ni rastro de playa.

Después de ver la ciudad,de coger los panfletos correspondientes en la oficina de turismo y hacernos un croquis mental de donde pasábamos la noche,nos retiramos a descansar.

Al día siguiente nos dirigimos al norte.

Con María mas relajada porque era ella quíen conducía.Destino:La costa esmeralda.Uno de los sitios preferidos por la Jet Set,tampoco ibamos a ser menos.

Miramos las referencias en nuestras inseparables guías de viaje.Había un pueblo cuyo nombre no recuerdo,donde mencionaban directamente las guias:si quieres algo barato,desiste de ir allí.Era un sitio donde al parecer estaba a tope de yates lujosos y gentuza de esas artes.Asi que nos decantámos por la otra opción,se llamaba Palau.

Tenía unas playas chulísimas,con rocas de formas curiosas provocadas por la erosión.Después de el baño de rigor,y de comer a lo hippie unas pizzas en un parque,nos dirigimos a Nuoro,en el puto centro de Cerdeña.

La ciudad reina del caos automovilístico.Aquí no había cuestas.Eran rampas de lanzamiento,una pasada.Alli la gente creo que nunca termina nada,porque es que tienen todo pendiente...y nosotros con un coche a gasolina...En Nuoro vimos tambien el museo y todo el centro.

En la oficina de turismo nos dijeron de sitios para dormir.Fué curioso,porque nos marcaron varios sitios en el mapa,y resulta que llamamos y quedámos con una persona,nos confundimos un poco yendo a un bar que creiamos era de esa persona,y resulta que acabamos quedando con otra señora.Cosas que pasan.Para que luego digan que el italiano se entiende muy bien,que es como el español.

A esta mujer le dejámos el grifo de la ducha goteando constantemente una cantidad nada despreciable de agua.Ya debía de ir mal,digo yo.

Al día siguiente,tambien le tocó a María abandonar su relajación...

Que divertidas las cuestas.Cuando ya creía tenerle cogido el tino al vehículo,se me caló el cabrón en una cuesta.Coches pitando,un policía que se me acercaba por detrás,al coche que le precedía casi le casco...Yo pensando en décimas de segundo"el cacharro este está a nombre de María y se supone que solo puede conducir ella,hay como pida los papeles el madero" Metido en esta guisa,salímos de aquella rampa de lanzamiento con un aceleron justo al tiempo que el careto del policía por mi ventanilla era ya casi una realidad.No me quedaba aún claro si cuando el individuo bajó por la cuesta,no era sino para coger su moto y seguirnos para hacernos parar,pero o no era su intención o es que lo despisté...

Me recordó este episodio a película típica sobre evasión a ultima hora de algún campo de concentración nazi o algo así.Por los pelos.

Fuímos por la carretera mejor que tiene esta isla,que por no tener no tiene ni arcenes...Con el cacharro demandando gasolina,la gasolinera mas cercana a 30 Km,y con la reserva desde hacia rato encendido el testigo,y de repente,un jodido desvío por obras.

Cundió algo el nerviosismo,pero por suerte al terminar el desvío justo estaba la gasolinera.Todo un detalle.

Nuestro siguiente destino:Oristano.Ciudad importante.Capital de provincia.Esta si que era bien bonita.Con sus monumentos,estatuas y casas-palacio.Al parecer esta zona fué la última que resistió a la invasión de la Corona de Aragón,que aún se pasaron medio siglo dándose de ostias hasta conquistarla.El ducado de Arborea le llamaban.

Por la tarde fuímos a la población cercana de Cabras.Allí había una laguna que prometía (nos habíamos quedado con el mono después de la no visita a la anterior) Y anduvimos viendo garcillas y flamencos un buen rato.El número de estos seres rosas era tal,que cuando salían a volar parecía que daban inicio a un episodio de corrupción en Miami.

Con la noche ya de testigo,decidimos cenar en un restaurante que se anunciaba como típico sardo.

Yo,en mi afán de pedir cosas que no entendía en que consistían,para así recibir como un enigma el plato a comer.No salí de mi sorpresa cuando contemple que el manjar en cuestión que había pedido era una puñetera trucha fria con cuatro hierbajos.Eso y unos espaguettis.María una ensalada.Y poco más cenámos.Y nos metieron la gran clavada.Fué la excepcion.Está claro que a uno le ha de tocar de todo y de los demas dias no tuvimos queja.

Pero vamos,que el concepto que adquirimos de la gastronomía típica sarda en nuestra modesta escala de valores,no salió muy bien parada.Es como si yo monto un restaurante típico aragonés y te saco unas migas,media longaniza y una hogaza y te cobro como para ponerte morao,pero no de comer.

Aquella noche,volvimos a torturarnos el sueño en nuestro querido Lancia,con la laguna de los flamencos como fondo.

Al día siguiente,teníamos el plato fuerte,que no tenía nada que ver con las truchas.Era la antigua población de Tharros.Tendría que haber sido al revés,pues habría sido mas lógico irnos de Tharros para acabar Cabras .

Localidad fundada por los fenicios.Y habitada posteriormente por cartagineses y romanos,y abandonada en el siglo XI con la población hasta los cojones de los ataques de los berberiscos y piratas de toda índole,un dia esta gente la abandonó a su suerte para fundar más en el interior la ciudad de Oristano.

Decian que de Tharros se llevaban las piedras a carros.

Visitamos las ruinas.Una pasada,no era dificil el imaginar aquello en otra época.Era una ciudad muy grande,y con mucho todavía por excavar.Mucha historia acumulada.Hicimos la visita guiada,en perfecto italiano,claro está.Habia por alli también algún otro turista español perdido.

Alli comimos de lujo y barato.Como para contrarestar y esas cosas.

Al dia siguiente se nos acababa esto,por lo que volvímos entrada la tarde a Alguero.

Preguntamos para dormir y parecía que estaba todo ocupado.Nos quedaba la opción Meloni...Le llamamos -ningún problema,ahora mando a Salvatore para allá...-

Y Salvatore parece que se alegró al vernos.Nos acompañó a una nueva habitación,y esta vez parecia que estaba mas dicharachero,lástima que cuando hablaba no llegabámos a entender ni la mitad.

No nos pudo dejar llave porque hubo no se quíen que no se la habia devuelto,y nosotros salímos a ver la noche de Alguero.Cenamos en un sitio de puta madre.Yo volví a jugarme el menú a una carta,nunca mejor dicho,y esta vez me salió bien,pues resultó que lo que había pedido se trataba de un chuletón de buey con una guarnición que rebosaba el plato.

Al volver para dormir,resultó que algún insensato cerró con llave la puerta de entrada de la que no disponíamos de llave.

Llamada a Don Meloni, a las 12 y pico de la noche,y parecia somnoliento...-No se cuál es el problema que me estas contando pero ahora mismo mando a un hombre para allá-

Y allí apareció Salvatore,que nombre más apropiado.Esta vez lo hizo en coche y acompañado de otro tipo que espero fuera.Nos abrió con toda la amabilidad del mundo y se retiró.Como puede apreciarse,una situación de lo mas normal del mundo.

A la mañana siguiente tocaba despedida,no sin antes ir a a ver otro yacimiento cercano del siglo XV antes de Cristo;nurague de Palmaver.

Unas foticos,unas copichuelas y para el aeropuerto.

No deja de tener su historia que el detector de metales de Gerona no me detectara el botón del pantalón y el de Alguero sí,como añadidura yo llevaba unas pilas en el bolsillo que no recordaba tenerlas ahí,tuve que pasar tres veces por la cacharra y ya de primeras me registraron.Para mí que se pensaban que éramos de la Eta o algo así,porque no dejaron de colmarnos con sus atenciones.

En fín,que como todo lo bueno,se pasó muy rápido esta semanica.Habrá que pensar desde ya en algún proximo destino...