lunes, 25 de enero de 2010

Ser o no ser

Ser o no ser.
Una obra maestra. Sensacional.
Cuando hace algunas semanas veía "Malditos bastardos", vagamente me venían una serie de recuerdos a la cabeza: coño, esas escenas en el teatro, una actriz cooperando con la resistencia, la sátira generalizada que envuelve a toda la pelkícula...
Es irremediable pensar en ciertas ocasiones aquella vieja máxima que viene a decir que, en realidad, toda ha sido ya inventado antes, por rebuscado u original que parezca, y que sólo cambian las situaciones y el contexto en el que se exhibe. Muy cierto. Tarantino, pondría yo la mano en el fuego porque "Ser o no ser" fué uno de los films que más huella dejó en su atormentada persona.
Y no es para menos.
La fecha del film asusta; estrenada en 1.942. El mismo año en que comenzaba la Batalla de Stalingrado, en lo que significaron los primeros varapalos serios para los nazis, y también cuando desde el Gueto de Varsovia se empezaban a realizar deportaciones masivas de judíos hacia el campo de concentración de Treblinka. Con la friolera cifra diaria de unas 6.000 almas que allí eran destinadas desde entonces.
Varsovia, la capital polaca donde transcurre "Ser o no ser".
El caso es que la ví siendo muy crío, en esa etapa de tu vida en que parecen quedarse grabados en la memoria mil y uno fotogramas, y que con el tiempo, con escasos segundos que contemples, ya reconoces una película vista con anterioridad, eso si ; tus ojos, con los años, no la contemplan de la misma forma que antes. Grave sería lo contrario, claro que conozco a algún tipo y en plena madurez, que todavía sigue emocionándose como el primer día con "Los Goonies"...
Citaré la sinopsis que aparece en Filmaffinity, que si no luego me dicen que destrozo las películas porque las cuento enteras y por si aún no la ha disfrutado algún despistado :
"El profesor Siletsky, un espía al servicio de la Gestapo, está a punto de entregar una lista con el nombre de los colaboradores de la resistencia. Joseph Tura, actor polaco intérprete de Hamlet y esposo de María Tura, también conocida actriz, intentará solucionar esta peligrosa situación y, con la ayuda de los actores de su compañía, se hará pasar sucesivas veces por el cruel coronel Erhardt y por Siletsky para entrar en el cuartel general de las SS."
Interpretaciones soberbias.
Trama, que aunque satírica y por extensión, exagerada, no deja ningún cabo suelto (no es un intento de guasa acerca de la posible masacre de soldados alemanes y de diverso rango del que haga gala este film).
Una historia bien contada, inteligente. Que a buen seguro haría de reclamo propagandístico en las sociedades antinazis de la época.
Diálogos que despiden energía y llenos de intención.
Sinceramente, me resulta increíble una película así cuando quedaban todavía tres años para que terminase aquella maldita guerra. Como ya me sucedió con otra muy grande y posteada a mi manera también por aquí, "Los verdugos también mueren". Por cierto, que ahora veo en esa entrada un amable comentario recomendando un libro y con el que me pienso hacer...
A diferencia del director de esa película, el de "Ser o no ser",
Ernst Lubitsch, si que era judío. Para mí es un dato anecdótico, en las oficinas de información del Führer en su día, fijo que algún que otro quebradero de cabeza...
Poco se puede decir cuando una película aporta tanto, sólo vale el recomendar su visionado. Un tanto precario quizás, con ese sonido añejo que perturba un poco los oídos, y una musiquilla de fondo que sientes que en cualquier momento tu Home Cinema se va a poner concienzudamente a prueba. Pero, sin todo ello, perdería encanto.
Para verla online :
http://www.megavideo.com/?v=OI9CA8YO

2 comentarios:

  1. La película no sólo es buena, es buenísima. Desgraciadamente el remake que hizo Mel Brooks no estuvo a su altura; cambiando el humor sutil de Ernest Lubich por la socarronería americana.

    ResponderEliminar
  2. La de Mel Brooks no la he visto, pero supongo que será muy prescindible.
    Es lo que tienen los yankees, que se empeñan en boicotear grandes ideas o argumentos de otros países; sirva como ejemplo, aunque sea otro tipo de cine, la de "Los visitantes" francesa con la de "Dos colgados en Chicago", me puso malo en su día, que manera de suavizar tontamente una buena comedia. Hasta cambiaron los nombres como "Del Cojón" (que les debía de sonar demasiado grotesco)...

    ResponderEliminar

Deje AQUI su comentario