Asturias o trabajas

Viaje Zaragoza-Magallón-Calahorra-Ribadesella.O cómo desafiar a la geografía.

Acto I -MAGALLÓN-

Desde mi corto entender atisbo;

show que no pasará a los anales.

Futuros campeones de atletismo

quizá en sucesivos festivales...

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Nos preparámos para el viaje tras un día en el que a mí bien podía haberme pasado de todo.

Sólo basta con mencionar que en el trabajo pude haber explotado en la furgoneta por una botella de butano mal cerrada en el equipo de soldadura.

Suerte de mi tochuda amiga y mi nula disposición a fumar en el preciso momento.

Desde aquí mi guiño especial para el compañero cabrón que la dejó abierta y que pertenece también a la empresa ésta en la que me hallo, que cuenta con dos trabajadores...

Sea como sea, ya era San Viernes por la tarde cuando salímos de Zaragoza.

El C-4 de Don Enrique, tras cargar el equipo pertinente y supuestamente necesario para la actuación que daría más tarde Don Joaquín en Magallón, parecía tratarse de alguna especie de superbólido orquestal de los Autos Locos.Porque hostias, iba de bafles, cables y demás utensilios de sonido que daba miedo verlo.

Por fortuna desde el egoísmo, nos faltaba Patán, que no es otro que Topo Indeciso.Porque nadie me negará de su actitud perruna para evadirse de la juerga de los buitakos en éste puente festivo...

Así que con el espacio justo y unos pocos mecaguendioses cuando Juako aguantaba mi música en el auto y yo la suya, llegámos a Magallón.

Y aquel pueblo tenía menos ambiente de verbena que sentido común Topo Indeciso cuando declina una buena invitación.

Hasta aquí Mariano la reprimenda.Que sepas que se te sigue queriendo aunque simules fracturas,te inventes operaciones o hagas cábalas con el calendario para fabricarte una excusa.

No mentiré si digo que he observado más público esperándose a los títulos de crédito en una mala película que en el cine de Magallón donde Juako actuaba esa tarde.

Y por descontado que ninguna culpa tiene el mozo.Bastante que él se esforzó haciendo más light su repertorio y animando a lo poco que había; 4 abuelas somnolientas, 2 madres que no debían aguantar a sus maridos viéndoles beber tanto en el bar, y unos 12 o 14 chavales que correteaban pa arriba y abajo mientras Juako entregaba su show como el soldado despistado que se da cuenta que acaba de accionar con su andar desorientado el mecanismo de una mina antipersonal...

Porque yo no sé que sentiría él en aquellos momentos, pero poniéndome en su piel, una guerra me parece menos cruel.

¿Cómo cojones organizan ésto de semejantes maneras?

En el bar de al lado había una multitud que seguramente desconocía que coño sucedía aquella tarde en el cine.Y se abandonaban a la faria y al guiñote.

Al buen vino de la región y a las almendras golpeadas sobre barra.Es que ésta última costumbre me impactó.El camarero de aquella tasca ponía con cada consumición unas almendras sin plato ni nada.Y las ponía con tanto entusiasmo sobre la barra, que parecía como si no se diera cuenta que ya estaban sin cáscara.

En un acto de solidaridad y no queriendo pasar por el mal trago de ver a nuestro amigo con tan poco público, prácticamente el show íntegro lo vivimos en la barra. Kike y yo ajenos a la tragedia griega que allí se representaba.

Y cayeron unas cuantas almendras...

Trás una actuación de la que no llegó a pasar ni una hora, carretera y manta.

Dejámos Magallón a lo lejos, quizás como queriendo ver por la luna trasera del coche un "The End" que diera por terminadas las malas vibraciones de aquella tarde-noche.

Dejámos también todos los trastos de Juako allí en el cine, con idea de pasárlos a recoger a la vuelta.Entonces ya había espacio vital en el C-4.Pero Topo Indeciso tampoco llamó para ver si entonces podía acompañarnos...

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Acto II -CALAHORRA-

Con una buena compañía,

resistir a la modorra.

El transcurrir dócil del día

cuando otros buscan camorra...

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En Calahorra ya teníamos reservada una pensión para esa noche.

Así que el plan inmediato no pasaba más que por dejar allí nuestro equipaje y buscar un sitio donde cenar.

Porque aunque Don Joaquín sabía de su existencia, sabe Dios que lo tuvimos que "buscar" y rebuscar. Más de tres cuartos de hora andando y volviendo sobre nuestros pasos hasta que tuvimos la genial idea de preguntar a alguien por el lugar.

Pero bueno, el turismo ya se sabe que es muy agradecido.Y esto nos sirvió para comenzar una visita desde la pensión hasta los bajos fondos y volver al punto A.Que diferencias de iluminarias en la misma noche, oiga.

Cenamos en un "Drunken duck", y ni mal ni bien si no todo lo contrario.

Luego quedámos en un garito con un colega del Joaquín (Miguel??).

Vimos carteles por la calle sobre una serie de conciertos que en Calahorra tenían lugar.

Nos informamos debidamente y allí acudimos.

Y fué una auténtica sorpresa.

Al llegar nosotros estaba terminando de tocar una banda punkie de ésas que transmiten bien poco.

El sitio era bastante curioso, aunque tenía toda la apariencia de un bar se trataba de una peña.

Cervecitas y mucho humo alrededor. Bien de público.No cómo en cines de esos de pueblo a los que habría que poner dos "rombos"
Entonces salieron a escena Infamia.De los que aporto un video Aquí.

Muy buenos en directo.En el último disco colabora Víctor García de Warcry.

Grupo riojano que suena al metal de toda la vida y que cuenta con un cantante al más puro estilo Leo de Saratoga.

En su repertorio se atrevieron a versionear a Kiss o a Queen.Incluso a hacer una versión heavy del "sobreviviré" de Mónica Naranjo.

Nos dejaron una grata impresión.

Sería entonces la 1 y pico de la madrugada y tras el concierto, aún parecía que teníamos sed...

Con el colega de Juako nos fuímos de garitos.Y luego también nos acompañaron unas amigas de él.

En un momento dado pensé que igual teníamos follón asegurado.

Había unos gilis de melena en plena calle pavoneándose de sus dotes bélicas con un gili de pelo muy corto.

Entonces el gili de pelo corto de dirigió a un bar cercano donde había mas gilis.Se puso a reclutar gente de su misma condición para volver donde estaban los gilis de pelo largo y terminar así la noche haciéndo el gilipollas con mayúsculas con seguramente alguna de esas peleas donde acaban enredándose tantos gilis .

Y claro, a nosotros esto nos pilló en medio camino entre los dos bares, el de los gilis 1 y el gilis 2.

Y era fácil imaginarse que si entraba aquel que tenía más pelo que cabeza en un gilibar, diciendo "hay unos peludos que me querían pegar" ,y salir semejante atajo de necios y vernos de camino hacía su guarida de descerebrados, pués cabía la posibilidad que nuestros gadgeto-gilis tuvieran que actuar.

Por fortuna no fué asi.El gili principal debió de mostrarse bastante explícito con las descripciones, y una marabunta de gilis salió de aquel sitio dejando atrás un bar totalmente vacío.

Llegar y servirnos los camareros.Desde el exterior se oían giligritos, pero aquello ya nos daba igual. Un garito para nosotros solos.Y no estaba mal la música.

A altas horas de la madrugada. Cuando hasta los gilis ya han perdido toda inspiración,estuvimos en un antro cuyo nombre no recuerdo, pero que molaba mogollón.

Sonaba Skid Row,Aerosmith, Sociedad Alkoholika,Barricada...

La fauna era de lo más variado.

Había un curioso personaje que se autodenominaba "el gilipollas del pueblo" (un título a tener en cuenta viendo lo acontecido en la calle).Que recurría a expresiones tales cómo "¿no me querreís pegar?".Y que de cuando en cuando venía y te invitaba a bajar a la planta baja del bar para pillar unos chupitos.Y cada vez o nos contaba uno de más o uno de menos.Estaba claro que las gilimatemáticas no se le darían bien de crío.

Ambiente raro Raro.

Se me pusieron a hablar también unos punkies de olor penetrante.Que decían ser amantes del heavy metal, de que acudían a todos los festivales de música habidos y por haber e historias parecidas.

Menos mal que cuando charlaban con nosotros iban y venían todo el rato, porque aquel aroma era difícil de aguantar.

Pero descontando a los necios ávidos de pelea de esa noche, en su conjunto, buena gente con la que nos rodeámos en la movida calahorrana.

No parece que éstos busquen pelea.

Compañeros en la noche calahorrana.

El de la lengua fuera es la extraña criatura de los chupitos.Y yo meditando, supongo.

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Acto III -ASTURIAS-

Buen beber y mejor yantar.

Tierra noble impregnada de vida;

gente amable puebla el lugar

haciendo de su patria querida...

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Vista desde la ventana en la pensión de Ribadesella.

Sábado.Torno a las 12 del mediodía, desayuno continental y rumbo a Ribadesella.

A unos veinte kilómetros de nuestro destino, y cuando parecia no iba a haber más novedad que los propios mecaguendioses producidos por las elecciones musicales de unos y otros.

Nos paró en un control la Guardia Civil.

Normal.Yo lo dije a escasos metros...Joder, si parecíamos el comando Magallón por lo menos.

Se da la circunstancia de que antes de salir de Calahorra me quedé mirando un cigarrito de la risa que nos había regalado uno de los punkies olorosos.

Al llegar a la pensión bien entrada la mañana, lo dejé en un cenicero en el que más tarde apagué un cigarro.

Al recoger los enseres lo observé.Ví el aceitillo en el papel que produjo la colilla apagada.Recordé aquellos extraños aromas de cierta gente al acercarse y...Me hizo reacción. ¡Que le den! Don Enrique se encargó de tirarlo por la ventana.

Cuando lo más propio habría sido meterlo en mi paquete de tabaco, y ahí quizá se hubiera dado un craso error.

Nos paró la Guardia Civil en lo que fué todo un momento cómico.Le preguntaron a Kike :

-¿De donde son?
Por supuesto que aquí no hubo dudas en la respuesta...

-¿A donde se dirigen?

Aquí entonces Kike giró su cabeza hacia Juako, quien iba de copiloto y le espetó algo así cómo:

-¿A donde era que íbamos?

Un pequeño lapsus con el nombre de la población.Suficiente para que lo siguiente que escucháramos decir a los de la Benemérita fuera:

-Bajen del vehículo, muy lentamente y de uno en uno...

Supongo que nos vieron las pintas de domingueros de situación y no se afanaron mucho en registrar el coche.Y a uno de los agentes hasta le debió gustar mi chupa de flecos que descansaba en el maletero, porque se ve que llego a decir"Hostias,esta es de la auténticas".

Asi que no nos entretuvieron más de cinco minutos.

Aquí me alegro de no haber sacado mi vena payasa que en áquel momento me vino a la mente.Cuando dijeron "Esto es un control destinado a posibles armas o drogas".

Que el chiste fácil era decir"Hoy estamos de suerte, colegas, que no han dicho nada de mercancías robadas...".

Seguro que si salgo con esas nos tienen allí todo el día y nos hacen andar en pelota picada por la carretera...
Llegámos sin mayor sobresalto a Ribadesella.A una bonita pensión.
Parajes ajardinados que invitaban al descanso, de aquel que creo que tampoco buscábamos en exceso...
Tengo la teoría de que Juako, trás aquella actuación en Magallón, algo se le había pegado de la chavalería y necesitaba salir menos y descansar más que el resto...

Asi que él, durmióse la siesta, que dirían por aquellos lares y Kike y yo nos fuimos a comprobar la estabilidad de las sidrerías.

Sábado por la tarde, a un porrón de kilómetros de Aragón y en poco menos de media hora; había todo un derbi futbolístico, ¡¡Real Zaragoza - S.D. Huesca !!

Parecía una misión imposible,pero joder, aquello teníamos que verlo.

En la primera sidrería que entramos observo la tele.El canal Odisea estaba puesto.

Miro el reloj mientras degustábamos una rica botella.

Le digo al camarero- Oye,no tendrás por ahí canales autonómicos...Es que juegan el Zaragoza y el Huesca, que nosotros somos de allí...

Vamos a ver hombre...

Y allí aparecía como por obra de magia, la Antena Aragón SAT.

Puxa Asturies !

Desde el principio del partido.No hacía mas que entrar gente al garito,en un momento dado lleno el bar.

Y allí había dos tíos extraños,uno animando a un equipo y el otro al otro.

En la segunda parte, y trás un descanso en el que a la gente se le mostraba por la pantalla lo bella que también es nuestra tierra con esos anuncios que potencian el turismo, me dice el buen tipo de la sidrería "A las 8 tendré que quitarlo porque juega el Sporting".Joder, si es que lo dijo cómo con pena.

Que majete.Me perdí el ver empatar al Zaragoza, pero es que a las 8 en punto le llegué a decir que pusiera ya el Sporting que si no la gente nos iba a terminar pegando...

Ya llevábamos cinco botellas a esas alturas.Es que entra como el agua.

Entonces apareció Juako, alguna botella más y nos fuimos a cenar a otra parte.

En lo que no significó un buen restaurante para el chuletón.

Una cerveza en otro bar y aquel día ya no los estiramos más tarde de lo que serían las 2 de la madrugada.Pero vamos que aún habíamos aprovechado bastante, a pesar de intentar convencer yo sin éxito a mis amiguetes para quedarnos más rato...

No salió ésta foto como quería.Obsérvese el muñeco que escancia automáticamente la sidra y su parecido razonable con el abuelete de detrás.Que putada que no se le vé bien el bigote.
El muñeco llevaba un botón en el cogote al que había que darle para servirse sidra.Y claro, cuando decíamos eso de "Dále un cazo al abuelo" para llenarnos los vasos, francamente podía llevar a la confusión.

Al abuelo real juro que no lo tocámos.
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Domingo.Otra vez al mediodía.

Planificación de mañana sana y provechosa.

Visita a Covadonga y Picos de Europa.

Una foto bastante artística por cierto.
Don Pelayo custodiando Covadonga.

O quizá avisando de las consecuencias si se nos ocurría dejar algún rastro por allí...

Pero no, fuimos de lo más civilzado.Si hasta fuímos a visitar la Iglesia de la cueva donde se supone que reposan los restos de Don Pelayo y vimos también la catedral.

Coincidimos con un grupo exaltado de brasileños que se pusieron a predicar por megafonía nosequé con un énfasis que acojonaban al más pintao.

Y yo aguanté poco en el interior de la catedral porque me pasa como al Damien de la película esa, que cuanto más me acerco a Dios más malo me pongo.
Anteriormente subimos a los famosos lagos.Ya los había visitado antes.

Y si, es bonito el paisaje.Pero no acompaña nada el pasear por allí arriba con unas botas destartaladas que allí se terminaron de romper.
Mis calcetines parecían torrijas recién hechas.
Me entraba una de agua en los zapatos...

Todo hierba mojada y tierra helada para la deshonra de mis húmedos juanetes.

Pero aguanté estoicamente por aquello de que luego dicen que soy el primero que siempre está con lo de "Oye, ¿y si vamos a un bar?"...

Tras las visitas de rigor, una parada en una tienda de recuerdos en la que yo no compré nada y rumbo a Cangas de Onís.

Los buitakos en el campamento de invierno.

En Cangas por supuesto que nos hicimos con productos de primera necesidad; queso,sidra,chorizo.paté...

¿Y unos zapatos? Va, para que, si ya he pasado lo peor...
La mujer de la pensión de Ribadesella donde nos hospedábamos fué casi como una madre para nosotros.

Desde las 12 a.m. llevaba esa gran mujer preparándonos las fabes y se nos hicieron las 4 de la tarde cuando regresábamos a tan ansiada comida.
Y es aquí donde entró en acción el anárquico sistema de navegación de Don Enrique.

El puto GPS.

Cada vez estoy más convencido que responde a la abreviación de -Guiarte Por Sendas-.

Salímos de una carretera de puta madre en la que podía leerse "Ribadesella 16 kilómetros", para adentrarnos por unos caminos en los que se hubieran negado a transitar las jodidas vacas.

El camino se ensanchaba...más ...más...

Si no es porque vimos un socavón en medio de una cuesta,con unas piedras por ahí dispersadas y un auténtico barrizal de porqueriza, seguro que habríamos continuado hasta llegar a alguna cima en la que nos esperarían una manada de tigres dientes de sable hambrientos o alguna tribu de neanderthales.Porque aquello tenía toda la pinta de tierra inhóspita.De no haberla pisado ni Dios con anterioridad.

Jamás pensé que el C-4 fuera capaz de dar la vuelta con tan solo 30 centímetros de distancia por detrás,porque claro, por delante sólo estaban ya los matorrales que precedían al abismo...

Y marcha atrás suponía todo un problema por el zigzaguear del camino.

Y haber quien tiene huevos de bajarse a dar indicaciones en un mar de barro.

Pues salímos de esa.Era evidente, si hemos aguantado más de una veintena de shows de Juako, ¿nos ibamos a quedar ahora atrás?

Uno de los mejores tramos por donde nos guiaba el GPS.

El tema es que al festín de las fabes llegámos sobre las 16.30.

Hora un tanto extraña para comer.

Nuestra madre en adopción de este puente nos sacó una perola anunciando que "ésta, cómo si fuera para familiares"...
Jodoo.

Receta casera y exquisita.

Con el plato aparte con el "compangu" (he recurrido a Google para recordar el nombre), useáse, choricico, morcilla y tocino...

Acabámos la perola.Tres platos cada uno.

Una auténtica bomba.Más de cinco horas de digestíon por lo menos.

Y el animal que escribe, que fué quien más fabes comió, aún tuvo cojones de cenar aquel día un buen plato de carne.

Después de comer descansámos algo,nos duchámos y esas cosas y trás 6 o 7 botellas de sidra y la pertinente cena que Juako y Kike transformaron en un diminuto ágape, decidímos que aquella noche también debía ser guerrera.

Juako recurrió a su síndrome juvenil adquirido en Magallón y cómo si del Pitufo Gruñon se tratara no hacía más que insistir en que no habia nada de marcha en ése pueblo y que a dormir a la pensión...

Asi que él aguantó bastante poco.
Menos mal que debía ser sosa la noche...
La música no nos gustaba, pero por ahí permanecimos de charradicas.

La posible hora de regreso parecía que se iba alargando.

¿Pues no acabámos a las 8 o las 9 de la mañana'

Ya cuando parecía íbamos a retirarnos también a la pensión nos dió por tomar la última en un extraño bar, en el que el día anterior observemos que lo frecuentaba gente de corte cuarentón.

De hecho se llamaba "Carroceu", único garito del que recuerdo bien el nombre porque yo insistía en que aquello significaba "carroza" en lengua bable.
Pedimos unas cervezas y la majeta camarera nos indica al pagar que a esa ronda nos habían invitado.

Nos mirámos Kike y yo.

Pues si por aquí no conocemos a nadie...

Giramos las cabezas y nos encontrámos con el camarero y camarera que trabajaban en el garito anterior.

Y allí estuvimos con ellos.Ronda de chupitos.Ronda de cerveza.

Casi no nos dejan marchar.

Que maja gente puebla aquella tierra, en definitiva.

Antes de que hiciera acto de presencia el síndrome Magallón.

De copas en Ribadesella.

Muy buen ambiente.

Epílogo
Regreso por carreteras mojadas y cielo inquieto.
El C -4 a reventar; recogímos el equipo dejado anteriormente en Magallón, pero ahora en el interior también van 5 cajas de sidra y otros productos típicos.
Llegamos a la conclusión de que si llega a venir Topo Indeciso, uno de nosotros habría terminado abandonado en una gasolinera.
Nada más llegar a casa recibo una llamada.
Mr. Pancet y Raquel.Que si iba a bajar por el local.
Les cuento mi situación y les invito a pasar por mi casa...
-Tengo unas botellicas de sidra si quereís probar.
Y así fué, y cómo siempre con estas historias existe el mismo final; menos mal que mañana trabajo, y así podré descansar....
P.D. - No sé si alguien va a tener cojones de leerse este post integro,doy fé.Pero archivado queda.