"En el 2009, seis de los mejores hombres del Sebastian Bar que formaban una panda, fueron enviados a Cádiz por un delito que si habían cometido. No tardaron en fugarse de la ciudad en la que vivían recluidos. Hoy, buscados todavía por el resto de hosteleros, sobreviven como borrachos de fortuna. Si tiene usted alguna verbena y se los encuentra, quizás pueda engatusarlos..."
pishaaa, el rezto de ezpedició tambié hemo llegao entero, zanos y zalvos, o eso parece en un prinsipio. Ahora unas horicas de relash y pal juan.
ResponderEliminarEn unas horas a ver si hago crónica, que se antoja larga...
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