El largo Viernes Santo

 

No hay nada como esperar poco de las cosas para disfrutar plenamente de ellas. Aquí tenemos un claro ejemplo, "El largo Viernes Santo"-The Long Good Friday-. Título que me sugería que se trataba de alguna peli de terror de escasa valía y sólo apetecible para las horas tontas de la sobremesa, ya se sabe; si me duermo en el sofá, da igual, que no me habré perdido gran espectáculo. Nada más lejos de la realidad.
Quien disfrute con películas como las de Guy Ritchie (Snatch. Cerdos y diamantes o Lock & Stock), pronto comprende que su escuela se debió forjar con films como éste, aunque no creo que existan muchos que lo superen, ciertamente.
Jugando con los tópicos, pudiera ser una mezcla de El Padrino y la mencionada Snatch, aderezada con ligeros compuestos de Uno de los nuestros y con toques nada despreciables de terrorismo salvaje...

Por no desmenuzar la trama, acompaño la sinopsis de hoycinema :
Pintura notable de la rivalidad entre matones por controlar los negocios y el dinero que se mueven en los muelles de Londres. Bob Hoskins es Harold Shand, un gánster, un hombre duro como el pedernal que controla dinero de la mafia norteamericana y tiene el apoyo del crimen organizado. Tiene poder, vive rodeado por el lujo y nada parece amenazar su posición. Pero de pronto una bomba hacer volar por los aires su Rolls Royce matando a su chófer; otra bomba destroza su pub. ¿Quién quiere destruirlo? ¿Quién es su enemigo?

Bob Hoskins, magistral. Encarnando al jefe mafioso que tras diez años de paz y prosperidad, despierta violentamente de su letargo. Una intriga no resuelta hasta los momentos finales, unas geniales actuaciones y esas pizcas de humor negro tan gratificantes para quienes gustan del genero. Tremendo su comienzo, cuando muere el chófer y el jefe mafioso proclama algo así como "¿Qué clase de desalmado mata en la puerta de una iglesia?...eso no se puede hacer HOY, que es Viernes Santo". O la escena en que los protagonistas no mueren por el canto de un duro, al explosionar el restaurante dónde iban a cenar, cuando uno de sus secuaces llega tarde a la cita y el jefe le argumenta entre los escombros y con resignación; "se ha quemado la cena".

Una curiosidad de la película es que hace su debut cinematográfico Pierce Brosnan, aunque no es que aporte gran cosa en ella.

En resumen, una de las mejores pelis que he visto en el último año (aunque no sea precisamente actual) y sin esperarlo. Grata sorpresa.

Trailer :