Ciudad de vida y muerte

Gran película.
Aunque rodada en blanco y negro, el esmero en la escenografía y los efectos especiales dan una extraña sensación de colorido.
Visualmente atractiva desde su comienzo.
Muy asiática, que pudiera decirse. Con esas acostumbradas escenas orientales donde una enorme multitud de extras abarrotan la pantalla y que le otorgan tanta espectacularidad.
Otra cosa que me llamó la atención fué su sonido. Vale que tenga una instalación de altavoces en el salón de mi casa que casi es para perderse. Una maraña de cables entre el DVD, la TV y el Home cinema, y que me cuesta trabajo recordar sus conexiones, pero que suena de puta madre. Y en este film, cuando lanzaban las granadas, tenía que plantearme seriamente si agacharme por si acaso.
Arrancaba la película con un constante tiroteo en el jodido comedor de mi casa. La emoción estaba servida y me sentía con ganas de disfrutarla, sin importarme demasiado si me iba a quedar sin balas.
Lo dicho, un placer para los oídos. No se como será la versión doblada, pero en la versión original -con subtítulos, claro está- en japonés y chino, simplemente te atrapa.
Nanjing! Nanjing! (City of Life and Death) es el título correcto.
Nanjing, la antigua capital china, antes de que entraran los japos a sangre y fuego en la 2º Guerra Mundial, destruyendo la ciudad y aniquilando a su población.
Es ahí donde se centra la totalidad del largometraje, con las tropelías y barrabasadas de los nipones y sin censura alguna.
Un drama estremecedor, pero verídico. Otro ejemplo más de las oscuras miserías humanas.
La bestia que llevan dentro los desalmados en períodos de guerra.
La aniquilación sistemática de los vencidos; soldados y civiles, mujeres y niños.
Dura de ver, a poca humanidad que atesores.
Ametrallamientos en la playa, violaciones, entierros en vida...
Otro punto a su favor es su enfoque realista y consistente : No hay grandes héroes ni seres que hagan brillantes proezas, algo muy loable cuando el film que tratamos es asiático...Hay hechos concretos, llevados a cabo por personas simples, que aportan un mínimo de dignidad entre semejante escenario de jodidos locos.
La película tiene un ligero toque documental también, en el sentido de como van desarrollándose los sucesos.
Alguna crítica he podido leer donde le buscaban paralelismo con "La lista de Schindler", pero no lo comparto del todo. Será por el blanco y negro. A mí me recuerda quizá más a "Hotel Ruanda", donde sólo los que ocupaban ese espacio se salvaban de una matanza segura. Algo parecido sucede en Nanking con la embajada de Alemania.
Las calles se contemplan, si me apuran, como en un videojuego, casi en primera persona. Quíen haya jugado al "Call of Duty" quizá entienda a lo que me refiero.
La única pega que le pongo es otra costumbre muy habitual en este cine, las asfixiantes pausas. Coño, que te da tiempo en determinadas escenas a echar un cigarro esperando si alguien se decide a sacar de una santa vez la puta pistola...
Muy recomendable.