Malditos Bastardos

En verdad que ayer disfruté bastante con esta película. Uno oía comentarios y le picaba la curiosidad por verla; gente que decía que se trata de una obra maestra y otros que de un tostón.
Para mí, no llega a la altura de Reservoir dogs o Pulp fiction, pero si que me ha atrapado mucho más que Kill Bill, comparando films del mismo autor.
El Quentin Tarantino sangriento de toda la vida. Pese a que la película se desarrolla en un marco hasta entonces no explorado por el director, desde el inicio queda vigente que está aplicado su sello genuino.
Creo que tendrá tantos admiradores como retractores, pero ese sello personal es dificilmente igualable, si descartamos las copias baratas y los intentos fallidos...
El universo mental de Tarantino parece siempre ser un elenco de personajes locos o desesperados, que tienen bien poco que perder, y que buscan la manera menos heterodoxa para acabar con otras vidas. Lo que nunca deja de plasmar en sus obras, por tanto, es la originalidad salpicada en sangre. Asi que si no te gustan las escenas violentas, al menos no puedes negar que casi al 50 % de contenidos ya te está aportando algo una película suya.
Claro que luego también están los guiones, y este hombrecillo tampoco suele defraudar con ellos.
"Malditos bastardos" hay que planteársela como lo que es, una farsa. Un guiño cachondo a uno de los sucesos más crueles de cuantos ha sufrido el ser humano. Ojalá el comando del que narran sus peripecias en el film hubiese existido, y Tarantino les hubiera acompañado, mostrándoles la ruta a seguir, cámara en mano...Pero no, la película aunque se nutre de variedad de personajes históricos de la 2º Guerra Mundial, es como una gigantesca obra de teatro. Aparecen Goebbels, Bormann, Hitler...éste último demasiado parodiado, aún respetando las libres licencias que se otorgan en el film.
Pienso que está muy bien estructurada en capítulos, con las casi 2 horas y media que tiene de duración.
Lo mejor, el que hace de malo malísimo, Cristoph Waltz. Un actor que ni recuerdo de algún papel secundario. Magistral en su función de oficial alemán sútil, inteligente, persistente, culto y grandísimo hijo de puta, todo en uno.
Con lo que más te ries, con las confusiones en el idioma. Importante ver la película subtitulada en versión original y recrearte con las distintas situaciones en muchos momentos...
Brad Pitt, con lo pedazo de actor que es, creo que podrían haberle sacado más jugo.

No se me hizo en absoluto larga. Y es la típica que de aquí a un tiempo, no descartas volver a ver.