Donde Cristo perdió la sandalia, muy cerca del lugar en el que le crucificaron, en parajes que sus ejecutores habrían dudado seriamente de la máxima de que todos los caminos conducían a su capital... Allí, tras esquivar el quinto pino, dejando a un lado
Casa Dios, y sorteando la plantación de pimientos, sabiendo que ya has dejado cuatro de ellos atrás-no se qué tiene el cinco en su forma ordinal, que siempre indica una lejanía de cojones (bueno en el caso "quinto coño" más bien desafía esa regla)-, das por concluído tu destino; has llegado a Valdespartera. Porque en ese barrio, que parece ser un punto mitológico donde se enfrentan a muerte los distintos vientos en una lucha feroz por establecer su hegemonía en la Tierra, aconteció nuestra última jornada gastronómica buitaka.
En una tarde-noche en que andar hasta el restaurante se tornaba como una cruel osadía, sólo al alcance de unos pocos intrépidos. Bueno, al alcance de esos y de un número reducido de pijines de Montecanal que me encontré durante el camino, y que creo desarrollaban una curiosa modalidad de footing; en carrera forzada, con cuerpo encogido y sus manos acariciando las piernas.
Pasé de ser Jinete del viento a Jinete remolcado por los alisios, pero llegué al sitio escogido sin grandes vicisitudes.
Llama Eterna como Maestro de Ceremonias. El lugar,
Abierto hasta el amanecer, en "Desayuno con diamantes, 7" :
Tiene que resultar complicado hacer cotidianos esos nombres de calles. Cualquiera que desconozca que todo el barrio está dedicado al séptimo arte, puede formarse conjeturas de lo más erróneas, pero no; ni la calle de "La Diligencia" está frente a los Juzgados, ni la de "Fresas salvajes" alberga lupanares lujuriosos, aunque lindando con ella se encuentra la de "Furtivos", que aporta cierta gracia. Tampoco creo que en la "Plaza del Hombre Invisible" haya gastado dinero el ayuntamiento en colocar alguna estatua.
Garito pionero en Valdespartera,
Abierto hasta el amanecer es un bar de los de toda la vida, que también dispone de restaurante para 46 personas.
Qué comimos. Estaba por ponerlo con interrogación y todo. Pasan cuatro días y se me difuminan los recuerdos. Más o menos lo de siempre, con una pequeña salvedad; Caballo Loco ha abandonado el barco. Naúfrago de solidaridad buitaka, ha decidido tirar por la borda experiencias pasadas y desenrolarse de la tripulación. Pero el asunto no ha llegado a mal puerto. Sus explicaciones habituales, con una serie de mecaguendioses y atomarporculo, nos hicieron comprender que su decisión responde únicamente a un acto de armonía espiritual consigo mismo. O algo así.
El segundo gran ausente, Topo Indeciso. Según apuntan los indicios, por la charla que tuvo con Llama Eterna por teléfono-más propia de estar conversando con un mandril esquizofrénico con paperas que con un ser humano-, el pobre sufre ciertas dolencias a raíz (nunca mejor dicho) de su malvenida recepción con las muelas del juicio.
Así pues, la cena la conformamos los tres individuos que comenzamos esta historia en sus origenes, Y han pasado más de tres años...
Fueron cuatro entrantes (omitiremos el "creo", que supongo ya asimilado).

Morro de cerdo, sepia, espárragos trigueros con
jamón y foie...
Y luego los platos fuertes. Elegimos los 3 lo mismo :
Solomillo de cerdo con foie y queso de cabra. Casi, casi, insuperable.
Postre; flan de baylis.
Dos botellas de vino, que no me centro con el nombre, pero recuerdo que tenía uno gracioso...
Carajillos, y chupitos (invitados, pero no dejaron las botellas-quizá por si nos quedábamos más tiempo del debido y las camareras tenían prisa por transformarse en las zombies de "Abierto hasta el amanecer", pero a solas- ).
140 €uracos.
Mi valoración general: Todo de verdad impecable, pero claro, divide el precio para 3 mardanos. Caro. Porque esta vez con el vino no nos cebamos tanto (18 € la botella).
Comí como hacía días no lo hacía, pero el precio no me parece nada popular. Pero, ¿que más da?, si ya no realizamos puntuaciones a los garitos.
Lo dicho, altamente recomendable por la calidad de lo que te ponen, pero un precio muy discutible.